Saw palmetto: Es el principal ingrediente que ayuda a luchar contra la alopecia androgenética. Inhibe la 5 alfa reductasa y, de este modo, ayuda a regular los niveles de DHT.

Pygeum: Inhibidor de la enzima 5-alfa-reductasa más potente junto al saw palmetto, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

Té verde: Actúa de forma sinérgica, junto con el saw palmetto, para conseguir regular de forma más eficaz los niveles de DHT. El té verde, además, estimula el crecimiento del cabello y protege a los folículos pilosos del daño ocasionado por los radicales libres.

Semilla de uva: Excelente antioxidante, ayuda a preservar la salud de los folículos pilosos. Estimula, además, la microcirculación del cuero cabelludo para que el pelo se nutra, estimulando así su crecimiento.

Pimienta negra: Ha demostrado ser de ayuda para la alopecia androgenética. Su principal propiedad es aumentar la biodisponibilidad de los nutrientes, para que el organismo sea capaz de asimilarlos mejor y aumentar, de este modo, su eficacia. Además, estimula el riego sanguíneo hacia los folículos pilosos.

MSM: Es una de las mejores fuentes de azufre orgánico, elemento imprescindible para la salud capilar. Diversos estudios científicos demuestran sus beneficios. Desde un mayor crecimiento del cabello a más brillo y grosor.

L-Cisteína: Aminoácido rico en azufre necesario para la síntesis de la keratina capilar. Energiza y revitaliza el desarrollo del cabello, estimulando su crecimiento.

L-Lisina: Interviene en la síntesis de vitaminas como la B6 y la C, y de minerales como el hierro, determinantes para la salud capilar y el crecimiento del cabello. Además, aumenta el efecto de otras sustancias como el saw palmetto para inhibir la 5 alfa reductasa, ayudando a evitar la pérdida de cabello de forma más eficaz.

Vitamina B5 (Ácido pantoténico): Prolonga la fase anágena (fase de crecimiento del cabello). Aumenta la calidad del cabello (evita la formación de puntas abiertas y le da luminosidad). Ayuda a evitar la caída del cabello, fortaleciendo la fibra capilar.

Vitamina B6 (Piridoxina): Ayuda a mejorar el aporte de nutrientes hacia los folículos pilosos, ya que participa en la formación de glóbulos rojos. Ayuda a regular el sistema nervioso en situaciones de estrés o ansiedad. Indispensable para el transporte de la cisteína (principal componente de la queratina) hacia el interior del folículo piloso.

Vitamina B7/H (Biotina): La biotina contribuye a la nutrición de los folículos pilosos y en el crecimiento celular, promoviendo así el crecimiento del cabello. Además, contribuye a aumentar la elasticidad y ayuda a fortalecer y engrosar el cabello.

Vitamina B9 (Ácido fólico): Contribuye a un crecimiento natural del cabello más rápido, con más fuerza y más brillo. Una deficiencia de ácido fólico puede desencadenar encanecimiento prematuro del cabello. Interviene en la síntesis y metabolismo de las proteínas, principal componente del pelo, y de los glóbulos rojos para un mayor aporte de oxígeno a los folículos pilosos.

Vitamina B12 (Cianocobalamina): Ejerce un papel importante para el crecimiento del cabello, ya que resulta esencial para la formación del ADN y la creación de los glóbulos rojos que aportan oxígeno a todo el cuerpo, incluidos los folículos pilosos. Una deficiencia de esta vitamina puede ocasionar un crecimiento lento del cabello o incluso su caída.

Vitamina C (Ácido ascórbico): Su capacidad antioxidante ayuda a que el pelo nazca más fuerte y grueso y a mantener su pigmentación. Prolonga su fase de crecimiento. Además, participa en la formación del colágeno y en la absorción de nutrientes como el hierro y el calcio.

Silicio: Esencial para la de producción de colágeno y elastina. Mantiene el equilibrio hídrico del pelo evitando que esté áspero y quebradizo. Le aporta elasticidad y mayor brillo. Contribuye a una tasa de caída menor.

Hierro: Tanto en la alopecia androgenética como en otros tipos de alopecia difusa, es común observar un déficit de hierro. El hierro interviene en la producción de la hemoglobina, esencial para transportar el oxígeno y los nutrientes a los folículos pilosos.

Zinc: Interviene en la producción de queratina y el colágeno. Su deficiencia se manifiesta con un crecimiento lento del cabello y un aspecto seco, sin brillo y quebradizo. Ayuda a controlar el exceso de sebo y también es capaz de inhibir la 5 alfa reductasa.

Cobre: Es esencial para el metabolismo correcto del hierro. Además, si hay falta de cobre, disminuyen los niveles de melanina y el pelo pierde su pigmentación.

Selenio: Potente antioxidante que ayuda a combatir los daños de los radicales libres. Además, junto al zinc, ayuda a fortalecer los folículos pilosos y prevenir la calvicie prematura.